Bewis de la Rosa, referente del rap rural en España, abrirá el ciclo «Música Thyssen. Conciertos íntimos» el próximo 4 de julio, a las 21.30h.
¿Qué representa para ti llevar tu propuesta de música, meta raíces, poesía y rap con mensaje social a un espacio como el Museo Carmen Thyssen de Málaga dentro de un ciclo íntimo?
Primero de todo, muchas gracias por contar conmigo y por querer hacerme estas preguntas. Amo ver mi proyecto en diferentes formatos. Me gusta que exista siempre esa puerta abierta a la modificación y a la reestructuración de lo artístico en distintos lenguajes y con diferentes tipos de cercanía con el público. Viniendo de la danza y las artes escénicas, siento que ese background me favorece a la hora de adaptarme a los espacios que se nos proponen con este proyecto. Para mí, cada lugar supone un reto: adaptarse al espacio, al público y a cada mirada.
Creo que lo que representa llevar esta propuesta al Museo Carmen Thyssen tiene mucho que ver con lo que más me gusta del arte: su constante transformación. Me interesa cómo una misma propuesta puede expresarse de formas distintas, según el espacio y el público.
¿Cómo se transforma tu directo en un formato más íntimo en un entorno tan especial como este? ¿Es un reto, una oportunidad?
Para mí es una oportunidad. Siempre me gusta mostrar mi trabajo desde diferentes perspectivas. El directo no sufrirá una modificación drástica en la dramaturgia o el mensaje, pero sí en la manera de estar sobre el escenario. Hago una puesta en común con el público al principio, mirándonos a los ojos, lo que me permite leer la energía del momento. Creo que va a ser muy especial, y disfruto mucho cuando el entorno es más íntimo y pequeño, porque siento que ahí es donde más se toca la humanidad.
Este ciclo invita al diálogo entre música y arte. ¿Qué tipo de relación encuentras tú entre tu trabajo y espacios culturales como este museo?
Para mí, el arte tiene una dimensión poliédrica. Mis proyectos siempre han tenido una investigación desde varios lenguajes: palabra, música, cuerpo, imagen… Entiendo el arte como algo complejo que no debería encasillarse. Creo que una propuesta musical puede incorporar muchos otros elementos artísticos, y ahí reside su belleza: en cómo una forma artística roza y se enriquece con otras.
Tus letras invitan a la reflexión y el cuestionamiento. ¿Qué tipo de conversación esperas abrir con el público que asista al concierto?
El arte es un acto de comunicación y necesita un receptor. Cada concierto es único, así que me gusta presentarme sin expectativas. Prefiero descubrir qué conversación se genera en el momento. Me encantaría poder responder esta pregunta mejor después del concierto, cuando sepa quién es el público. Pero sí deseo que sea una conversación amable, profunda, que conecte con nuestras raíces y también con nuestro futuro.
¿Qué emoción, palabra o idea te gustaría que la gente se llevara después de verte en el museo?
Me gustaría que se llevaran tres palabras: humanidad, reparación y amor. Creo que son fundamentales para la vida y para el día a día.
Museo Carmen Thyssen Málaga